Momento de ser «biodiverciudadanos»
La interacción dinámica entre personas, objetos y sistemas informáticos es a través de Internet: somos parte de la Era Digital.
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Estamos siendo testigos de la revolución 4.0, pero es posible que no sea por mucho tiempo si seguimos sin ser conscientes de los efectos a largo plazo que deja la huella de carbono generada en las ciudades.
Con la llegada de la pandemia en el 2020, las personas cambiaron su relación con los entornos y el confinamiento favoreció enormemente la calidad del aire. Por otra parte, contar con acceso a un teléfono inteligente permite que entidades locales y nacionales tengan plataformas de monitoreo y aplicaciones de telemedicina para revisar constantemente focos que sean peligrosos para la salud pública, teniendo conocimiento del movimiento y las interacciones sociales, actuando de forma inmediata, al tiempo que se verifica si la ciudadanía está cumpliendo con las recomendaciones de las autoridades.
Por estas razones, el uso de tecnología en la gestión de servicios de parte de las entidades gubernamentales o empresas, deberían propender por:
Tal como lo señala la estrategia de innovación de la OCDE, desde las mejoras incrementales hasta las novedades radicales, puede aumentar la sostenibilidad ambiental del desarrollo, sobre todo en vista de la inmensa riqueza de la biodiversidad de Colombia y las crecientes presiones del cambio climático.
El conocer las problemáticas de los ciudadanos, el saber qué es lo que les está pasando, el escucharlos y hacerlos partícipes en la toma de decisiones es la única forma de saber hacia dónde destinar los recursos de forma más eficaz y con mejores resultados para todos
Por: Nathalia Gamboa B.
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