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En un mundo que enfrenta desafíos urgentes como el cambio climático, la desigualdad social y el estancamiento económico, las ciudades buscan modelos innovadores para construir un futuro más sostenible, equitativo y próspero. En este contexto, las ciudades VIC (verdes, inteligentes y creativas) emergen como una alternativa prometedora, ofreciendo una hoja de ruta para transformar las urbes colombianas y mejorar la calidad de vida de sus habitantes.
En esta nueva era digital en constante evolución, tecnologías disruptivas como el Internet de las Cosas (IoT) y la inteligencia artificial (IA) están revolucionando diversos sectores, y el desarrollo urbano no es la excepción. Es por ello, que estas nuevas tecnologías poseen un gran potencial para impulsar el modelo de ciudades VIC en Colombia.
Recientemente, ciudades como Singapur, Ámsterdam, Barcelona y Dubái han elevado el nivel de vida de sus ciudadanos utilizando tecnologías como el IoT y la IA. Por ejemplo, Singapur utiliza datos de IoT para mejorar la movilidad y los servicios sanitarios, mientras que Ámsterdam enfatiza soluciones sostenibles para la movilidad, como sistemas de tráfico inteligentes y estaciones de carga eléctrica. Barcelona implementa sistemas de iluminación inteligente y promueve la eficiencia energética, en Dubái han desarrollado sistemas de transporte y seguridad inteligentes. Estas ciudades están liderando el camino hacia un futuro urbano más inteligente y conectado.
Sin embargo, la integración de las tecnologías de IA e IoT en las ciudades VIC no está exenta de retos y limitaciones que deben considerarse para garantizar un uso responsable y efectivo. Uno de los principales desafíos es la infraestructura tecnológica limitada. Según datos del Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC), Colombia cerró el tercer semestre de 2023 con 47,4 millones de accesos a Internet, pero solo entre el 52% y el 69,3% de la población rural no accede a servicios de conectividad con los estándares mínimos de calidad.
Otro desafío importante es la escasez de capacidades y talento especializado en IoT. Aunque Colombia cuenta con una creciente comunidad de expertos en tecnología, la falta de programas de formación específicos y la competencia global por talento pueden dificultar la contratación y retención de profesionales cualificados en Colombia.
Asimismo, la seguridad y la privacidad de los datos son preocupaciones críticas en el contexto de la IA y el IoT en las ciudades inteligentes. Con la proliferación de dispositivos conectados y la recopilación masiva de datos, existe un riesgo significativo de vulnerabilidades cibernéticas y violaciones de la privacidad. Según un informe de Adversarios Activos de la compañía Sophos X-Ops informó que existió un aumento de ataques vinculados a información de inicio de sesión, como nombre y contraseña, aumento del 26% de 2022 a 2023. Estas preocupaciones pueden obstaculizar la adopción de tecnologías de IA e IoT en entornos urbanos.
Por otro lado, la interoperabilidad y los estándares son elementos claves para el éxito de las ciudades inteligentes, pueden ser desafiantes de lograr en un entorno tecnológico diverso y en constante evolución. La falta de estándares comunes para la comunicación y la integración de sistemas puede dificultar la colaboración entre diferentes actores y la implementación de soluciones holísticas. Según un informe realizado por IBM reveló que el 47% aprovechan la inteligencia artificial, mientras que Bancolombia estima que sólo dos de cada diez empresas utilizan una solución basada en IoT.
Por lo tanto, aunque la IA y el IoT posean un gran potencial para transformar las ciudades y mejorar la vida de los ciudadanos, es esencial reconocer y abordar los desafíos y limitaciones inherentes a estas tecnologías. Esto implica establecer marcos éticos y legales que garanticen la transparencia y la protección de derechos humanos, fomentar la participación ciudadana, invertir en educación y capacitación especializada, así como promover la colaboración entre diversos actores. Solo a través de estas medidas, podemos aprovechar plenamente las oportunidades que ofrecen estas tecnologías para construir un futuro urbano más sostenible y equitativo.
Escrito por: Valentina Díaz
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